El día 10 de marzo, las Siervas de Jesús de la Caridad celebramos el 125º Aniversario de Fundación de la casa de Soria (España). En un ambiente familiar y sencillo se celebró la Eucaristía en la parroquia de San Juan de Rabanera que fue presidida por Mons. Abilio Martínez Varea, Obispo de la Diócesis de Osma-Soria y concelebrada por varios sacerdotes. Se contó con la presencia de Madre Martina Espinal, Superiora General, Madre Socorro Martínez, Superiora Provincial de la Provincia Virgen del Pilar y varias Madres y Hermanas de la comunidad de Madrid, así como de tres comunidades de Bilbao y Logroño.
Fue un día de acción de gracias al Señor por estos 125 años de entrega y servicio en Amor y Sacrifio de las Siervas de Jesús en Soria, que desde 1898 no han dejado de hacer vida el espíritu y carisma recibido de Santa María Josefa.
Compartimos las palabras de agradecimiento que Madre Martina Espinal dirigió a los presentes al finalizar la Eucaristía:
Ante todo, quiero agradecer al Señor que me concede la oportunidad de estar hoy aquí, junto a esta querida comunidad de Soria, celebrando este acontecimiento especial: El 125 aniversario de la llegada de las Siervas de Jesús a Soria. 125 años donde muchas de nuestras Hermanas han entregado la vida en el silencio y sencillez de las noches de vela a tantos enfermos en sus hogares, cuánto Amor y Sacrificio en la misión de cuidar, llevando la ternura y misericordia del Señor, especialmente en los primeros años, donde no faltaron los sufrimientos y contrariedades, pero siempre amparadas del amor y protección del Sagrado Corazón de Jesús y la maternal preocupación y cercanía de nuestra Santa Madre.
Las Siervas de Jesús desde los comienzos hasta el día de hoy han puesto su confianza en el Señor y en su Divina Providencia, buscando siempre su mayor gloria y el bien de los hermanos. Es la herencia que nos ha dejado Sta. María Josefa del Corazón de Jesús. Ella nos dice: “Bendigo a la Providencia Divina porque las privaciones de mis primeros años de Fundación les ha proporcionado a todas las Siervas de Jesús tan especiales favores; tengan muy presente que sobre la humildad, pobreza y sacrificios se han forjado siempre las obras de Dios”.
Hoy como ayer, el sacrificio de aquellas primeras Siervas de Jesús, que un 10 de Marzo de 1898 llegaron a Soria, acompañadas de la Madre Magdalena Galilea, Secretaria General, lo ha bendecido el Señor de manera admirable, y en su providencia siempre nos ha puesto en el camino a sus ángeles, amigos y bienhechores, quienes con su cercanía y ayuda incondicional han acompañado el camino de esta gran obra de amor y sacrificio que tanto bien ha prodigado a lo largo de estos 125 años. A todos los amigos y bienhechores, nuestro sincero agradecimiento. Especialmente a todos los habitantes de Soria que siempre han demostrado su cercanía hacia las Siervas de Jesús.
Quiero recordar aquí a tantas Siervas de Jesús que durante estos 125 años han dado su vida en el servicio a los hermanos y han hecho posible que llegáramos a este momento.
Mi gratitud a Madre Pilar Ballesteros y a las hermanas que hoy forman esta comunidad, por su testimonio fiel y generoso a pesar de que ya no pueden llevar a cabo la misión, pero su presencia sigue testimoniando el espíritu y carisma de Sta. María Josefa.
Gracias a todos por acompañarnos en esta Acción de gracias, que el Sagrado Corazón, bajo cuya protección se puso esta fundación, la Stma. Virgen y Sta. María Josefa, bendigan y acompañen vuestras vidas y recompensen la cercanía y cariño hacia esta pequeña comunidad.
“Fue un día de acción de gracias al Señor por estos 125 años de entrega y servicio en Amor y Sacrificio de las Siervas de Jesús en Soria”.