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Sor Tatiane Flore, Juniora en tiempo de formación, reflexiona sobre el discernimiento. ¿Cómo lo consigue? Ella encuentra la respuesta en la oración, en la Sagrada Escritura y la comparte con nosotros:

En el mes de octubre del año pasado, comenzamos un curso sobre espiritualidad ignaciana, dado por el sacerdote Jesuita, P. Épiphane Kinhoun, de Benín, doctor en Antropología filosófica y vicerrector de la Universidad Católica de África Central. Este padre es ayudado por religiosas que organizan las secciones.

El curso está dedicado especialmente a jóvenes profesas que ya han hecho los Ejercicios Espirituales de San Ignacio, para ayudarles a comprenderlos mejor.

Las clases se imparten en la capital de Camerún (Yaoundé), en una comunidad de las Hermanas de María Inmaculada, donde se reúnen varias Congregaciones ignacianas de todas partes de Camerún. El estudio es de tres años y en cada año hay tres sesiones.

Para mí, cada sesión es un tiempo de gracia que el Señor me concede, ya que el curso me ayuda a seguir con firmeza y alegría al Cristo que decidí seguir hace unos años. Me ayuda a estar más atenta a todo lo que sucede en mi vida día a día, a comprender las mociones interiores que surgen en mí y a identificar lo que viene de Dios a través del discernimiento.

Esta formación, para mí no sólo es una formación espiritual, sino también humana, porque me forma como religiosa y también como mujer a través de los diferentes temas que abordamos.

Durante un tiempo, no relacionaba los estudios y la vida comunitaria, pero me di cuenta a través de la oración y de este curso que el verdadero problema era que no estaba prestando atención y que no estaba dando sentido a lo que vivía cada día. Ahora comprendo que es muy importante dar un sentido a lo que vivimos en cada momento. He aprendido a ver las cosas de otra manera y doy gracias a Dios de todo corazón por sus maravillas y por el regalo de esta formación. Agradezco a Dios y a mis Superiores.

Sor Tatiane Flore SdJ

El curso está dedicado especialmente a jóvenes profesas que ya han hecho los Ejercicios Espirituales de San Ignacio, para ayudarles a comprenderlos mejor”.