“El Sagrado Corazón de Jesús es el único Fundador, Él ha sido el que lo ha hecho todo, yo no he sido más que el instrumento, aunque indigno de tal merecimiento” (Santa María Josefa)
La devoción principal de Santa María Josefa fue el Sagrado Corazón de Jesús. La Madre, puso al Instituto por ella fundado, bajo la protección del Corazón de Jesús, cuya fiesta se celebra como la principal y con la mayor solemnidad posible.
Este amor y devoción, que quiso llevar por todo el mundo, queda reflejado en sus cartas. Así, escribe a una de sus comunidades: “Les deseo que pasen bien la fiesta del Sagrado Corazón de Jesús, sobre todo con tranquilidad y alegría santa, como buenas religiosas”.
A una Sierva de Jesús le dice: “Si se aficiona a tratar interiormente con Jesús, encontrará en Él su mayor alegría, gozará de la tranquilidad de espíritu, única felicidad que hay en este mundo, y sobre todo vivirá contenta con el solo deseo de agradarle y procurar su gloria, no sólo en el ejercicio de nuestra misión, sino también entre sus Hermanas, por su buen ejemplo”.
“El día del Sagrado Corazón de Jesús, dice a una Superiora y Comunidad, pedí por todas muy especialmente, encomendándole las necesidades particulares de cada una. A todas las dejé en aquel Corazón divino; si allí permanecen por la pureza y perfección de sus obras, encontrarán en Él el mejor Director de su espíritu, el consuelo en todas sus penas y la recompensa de todos sus sacrificios; así, anímense para terminar este mes de junio con mucho fervor…” (Cfr. Una heroína de caridad, pag.672-673)
La devoción al Sagrado Corazón de Jesús, recomendada por tantos santos, es fuente de bendiciones para las almas. Aprovechemos este mes de junio, dedicado a Él, para vivir y propagar su devoción. ¡Sagrado Corazón de Jesús, en Ti confío!
S.M.D.B.
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