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Hace apenas unos días, el 7 de Marzo a las 8 de la noche, las Siervas de Jesús recibieron un homenaje en el Ayuntamiento de la Ciudad de La Unión – Cartagena (Murcia), en recuerdo a las Hermanas que dieron su vida sirviendo a los enfermos.

La Unión, es un municipio situado al sureste de la región de Murcia, cuya principal riqueza es la industria minera desde hace siglos. De ahí el gran número de obreros que trabajaban en sus minas y que por distintos motivos tenían que acudir al Hospital de la ciudad.

Desde el año 1893 hasta 1940, las Siervas de Jesús de la Caridad regentaron el Hospital de La unión. Durante 47 años, ¡cuántos enfermos atenderían!
Pero la caridad de las Hermanas no se encerraba en aquellas pareces. Las condiciones de pobreza de la época traían consigo epidemias como la viruela y el tifus y la gente pedía Hermanas para que les atendieran en sus domicilios. Con este fin se aumentó la comunidad que no daba abasto para atender tantas necesidades. Una de las Hermanas murió víctima del tifus atendiendo a una familia en la que todos estaban contagiados de la enfermedad.

Pero el motivo del homenaje era la celebración del “Centenario de la huelga de los mineros”, ocurrida un 7 de Marzo de 1916.
En dicha huelga, que se llevó a cabo en toda la Sierra Minera, los obreros reivindicaron
sus derechos, resultando siete muertos y decenas de heridos.
En medio de la tragedia, las víctimas fueron atendidas por los miembros de la Cruz Roja y las Siervas de Jesús. El pueblo sintió el apoyo y desvelo de “las monjas del Hospital”.
Después se ha sabido que no solo ayudaron con la asistencia sanitaria, sino también con su valor, poniendo paz en medio de tanto desconcierto y evitando que hubiera más muertes.

Recordando aquellos hechos, La Unión ha querido celebrar el Centenario. Como bien destacó D. Francisco Ródenas en su amplia presentación histórica: Esta noche no queremos, ni podemos celebrar la tragedia, sino conmemorar los esfuerzos y sacrificios de aquella generación de hombres y mujeres valientes que lucharon por su dignidad.

El acto se celebró en el salón de Plenos del Ayuntamiento. Después de la actuación de varios cantores del cante de las Minas, Dñª Carmen Riquelme, Concejal de Cultura y el Sr. Alcalde, D. Pedro López hicieron entrega de los diplomas de reconocimiento a los familiares de las víctimas y a las Asociaciones que ayudaron aquél 7 de Marzo de 1916.

Madre Rosa Mª Corral, Superiora Provincial, que fue acompañada de varias Hermanas Siervas de Jesús, fue quien en representación de la Congregación recibió el homenaje que la ciudad de la Unión les ha querido tributar.

Visiblemente emocionada, Madre Rosa Mª dijo unas palabras de agradecimiento a los presentes por haberse acordado de las Siervas de Jesús después de tantos años como hace que salieron de La Unión. Y es que, “el amor no pasará jamás” (1 Corintios 13)