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En la Comunidad de las Siervas de Jesús de la Caridad, de la Calle Uría, en Oviedo, catorce religiosas dedican su vida a ayudar a los demás con la colaboración de un buen grupo de voluntarios. Atienden un comedor en el que diariamente dan desayunos solidarios. Este, está situado en un claustro de la comunidad que da a un jardín interior, como los que ya no existen en la céntrica calle. Allí, precisamente, es común ver pasear a Sor Aurora, una Hermana que tiene cautivada a su Comunidad por su longevidad y entrega.

Sor Aurora, a sus 101 años es la religiosa más anciana de la Congregación y, dicen sus Hermanas, que está estupendamente de cabeza, corazón y cuerpo.

Sor Aurora, nació en 1921 en Lugo, de donde mantiene algo de acento. A los 20 años se trasladó al noviciado de Madrid para comenzar su formación y posteriormente su vida de servicio a los enfermos y necesitados. Ha estado destinada en Sevilla, Zaragoza, Madrid, Lugo. Ha sido Superiora de varias comunidades y hasta hace diez años, que llegó a Asturias, atendía a los enfermos en sus domicilios durante la noche.

Sor Aurora, es feliz recordando su vida de “Amor y Sacrificio”. Ahora, dice que ayuda muy poco, que solo le queda orar por sus Hermanas y por todo el mundo. Según su Superiora, Madre Teresa Martínez, ayuda en todo lo que le es posible. Y es que no ha hecho otra cosa en su vida que “servir a los demás”.

Felicidades Sor Aurora, eres todo un testimonio de vida para tus Hermanas Siervas de Jesús de la Caridad.

(Noticia publicada en el periódico “El Comercio” de Oviedo)

80 años sirviendo a los más necesitados.