En el marco de la Visita Canónica de Madre Marina Espinal, Superiora General, a la comunidad de Alicante (España), queremos compartir la alegría de Sor Mª del Pilar San Martín Castro, quien con gran sencillez a sus 102 años de edad y 78 de vida religiosa, expresa su felicidad de estar consagrada al Señor como Sierva de Jesús.
Nuestra Hna. Pilar, a pesar de sus años tiene una lucidez que es de admirar, es muy animada y no representa su edad. Gran parte del día está sentada en su silla de ruedas, que ella misma maneja. Va rezando muchas Ave Marías, reza a los santos de su devoción y como dice: ahora tengo todo el tiempo para rezar, y así lo hace. Nos comparte que, lo que la ha hecho feliz en la vida religiosa ha sido hacer la voluntad de Dios, aunque reconoce que no siempre es facil aceptarla. Es una Hermana muy agradecida con lo que le hacen, y desde la mañana hasta la tarde participa en todos los actos de comunidad, compartiendo en las recreaciones sus experiencias como Sierva de Jesús. Es un ejemplo de vida serena, que disfruta con todo, alguna vez las hermanas jóvenes la llevan de paseo y a pesar de ver muy poco, admira la belleza de la ciudad y eso la hace feliz.
El testimonio de entrega generosa y feliz de nuestra Hna. Pilar, nos anima a vivir la vida religiosa con ilusión, a disfrutar con lo sencillo de cada día, haciendo todo el bien que podamos en el silencio de la misión de las Siervas de Jesús. Para la comunidad de Alicante, Sor Pilar es un testimonio de religiosa fervorosa, alegre y agradecida, y disfrutan con ella atendiéndola con mucho cariño.
Gracias Sor Pilar por su gran amor al Instituto, por sus años de vida entregada con Amor y Sacrificio al servicio de los hermanos que más sufren. Es un regalo de Dios tenerla entre nosotras y poder experimentar el paso de Dios por su vida.
Hna. Adriana Mendoza, SdJ
“Sean agradecidas; la gratitud trae consigo nuevos beneficios. El alma más feliz en este mundo es la que nada desea, fuera de Dios”.
Sta. M.ª Josefa
